Fausto Spotorno, economista y director del Centro de Estudios Económicos OJF, explica desde el punto de vista histórico, como la Argentina de principios del siglo XX, que posicionaba como una de las potencias mundiales, actualmente es uno de los países con mayores crisis económicas. Además, su visión económica y política del futuro del país.
– Quiero preguntarte como investigador. Hace poco escuche a Claudio Escribano decir esa frase del año 59’ de un premio nobel de economía que decía que hay cuatro países en el mundo: los ricos, los pobres, Japón que sin tener nada lo tiene todo, y Argentina que teniéndolo todo no lo tiene nada. Eso fue en el 59’, y tiene tanta vigencia más de cincuenta años después.
– Ahora el FMI y el Banco Mundial cambiaron un poco los grupos en como clasifican los países, ingresos medios, etc. Pero en un momento era países desarrollados, países subdesarrollados, países en vías de desarrollo y había un solo país en la categoría de países en vías de subdesarrollo: Argentina. Después lo cambiaron. Porque claro, es un país que, uno no tiene noción, pero Argentina entre 1880 y 1910 crecía a tasas que China hubiera envidiado. La tasa de crecimiento promedio anual era el 12%, durante treinta años mantuvimos esas tasas de crecimiento. Imaginate que pasaste de tener casi un millón ochocientos mil habitantes en 1880, a tener prácticamente prácticamente seis millones de habitantes en 1910. En treinta años la población se multiplicó por tres, y aun así la gente vivía bien, entonces eso fue Argentina. Eso fue un boom de desarrollo, después vino la Primera Guerra Mundial, las cosas se empezaron a pausar un poquito, ya la economía empezaba a tener un poquito más de madurez, y se desaceleró un poco el crecimiento económico. Pero hasta 1930, y ahí es cuando hablas vos las fechas esas, se consideraba que Argentina iba a ser la próxima potencia latinoamericana, se imaginaba un mundo donde iba a quedar Estados Unidos en el norte, y Argentina en el sur. Bueno, hasta ahí llegó el sueño, y se hablaba de Argentina potencia, etc. A partir de ahí podemos decir que hubo una serie de errores o de malas políticas, o incluso de mala suerte. Una cosa importante de mala suerte es entender lo siguiente, cuando Estados Unidos a partir de la década del 20’, del 30’, empieza a ser la potencia mundial, el gran problema que tenía Argentina era que la potencia mundial ya no era más un cliente nuestro, como era Inglaterra hasta ese momento, sino que era un competidor nuestro. Estados Unidos fabricaba trigo, maíz, leche, carne, que era lo mismo que exportaba Argentina, eso es mala suerte. Después empezó toda esa famosa discusión: el famoso triangulo Estados Unidos, Inglaterra, Argentina, donde Argentina le vendía a Inglaterra y le compraba a Estados Unidos. Después de la crisis del 30’, y previo a la Segunda Guerra Mundial, la cosa se complicó más, y empezó a haber más restricciones en el comercio internacional, ya no era tan fácil ese triángulo, porque te ponía restricciones para el pago, entonces vos cobrabas en libras, pero tenías que pagar en dólares, y ya no era tan fácil la conversión, eso tampoco ayudó. Pero después Argentina también cometió muchos errores de política económica, empezó a soñar con esto de “vivir con lo nuestro”, de ser cerrarnos. Incluso el peronismo cuando asume, Perón pensaba en la Tercera Guerra Mundial, él pensó en un país que tenía que enfrentarse a la Tercera Guerra Mundial, y claro, como buen militar pensó en toda esa base geopolítica: “bueno, se va a venir la Tercera Guerra Mundial, la Tercera Guerra Mundial va a hacer un desastre, por la bomba atómica y todo eso, entonces hay que cerrarse y aprender a vivir con lo nuestro”. Pasó todo lo contrario, el mundo después de la Segunda Guerra Mundial se empezó a unir, se abrí el FMI, el Banco Mundial, Europa firma el primer tratado de libre comercio interno, que fue la del Tratado del Hierro, eso fue la semilla de lo que después sucedió en la zona del euro, la eurozona. Entonces fíjate que también errores de geopolítica, y después creo yo hubo un cambio en la forma de hacer política en Argentina, que eso si fue propiamente nuestro, donde prácticamente el estado generaba todos los recursos y distribuía, una visión de la economía de ese tipo, que enseguida llevó a la inflación.
– ¿Esa idea de ese estado de bienestar es el que viene permeado por algunos intelectuales europeos que proponen esa distribución? ¿O ya viene influenciado por el caudillismo más bien del control de la población? Para decirlo rápido
– En realidad, viene de un montón de conflictos. A ver, hoy los nazis son “horribles” pero previo a la Segunda Guerra Mundial en la Argentina había una idea filonazi. No desde el punto de vista de los judíos, toda esta historia, todo ese tema que sigue más implicado, pero si en cuanto a las ideas nacional socialista en materia de economía, por lo menos. Hace poco se había publicado una foto de, justamente, una reunión nazi en Argentina en los años 30’ en el Luna Park, lleno de gente. Hoy eso ya está afuera, pero hay que ponerse en la mentalidad de ese momento. En ese momento salimos del liberalismo clásico, que era lo que tenía Argentina dentro de sus ideas, y empiezan a aparecer estas ideas nacional socialistas, por un lado, ¿qué es el nacional socialismo? Es una derecha donde el estado no reniega de los empresarios, pero ve todo como corporaciones, de hecho, copiamos mucho del fascismo italiano, por ejemplo, el sistema de sindicatos es copiado del fascismo italiano, la misma idea de la UIA y esos esquemas, en donde en realidad vos tenés el grupo de empresas, el grupo de trabajadores, y el estado en el medio, y esa es la construcción que se hizo de la economía argentina en ese momento. Por otro lado, eso no quedaba tan mal con las ideas de izquierda que empezaban a aparecer. Incluso es más increíble, la izquierda hasta ese momento era los que pedían que se abriera la economía, porque lo que decía la izquierda en ese momento era, si lees a los socialistas de ese momento, si yo cierro la economía y protejo a la economía, perjudico a los trabajadores que no pueden acceder a productos baratos. Entonces, la izquierda estaba medio opuesta, pero no le disgustaba tanto los sectores de los sindicatos, de hecho, esta aparición de los sindicalismos tipo fascistas en realidad se pone para frenar a los sindicatos de izquierda de ese momento. Pero bueno, la Argentina empezó a variar completamente su visión de la economía de la que tenía la era previa. La era previa era una economía abierta al mundo, pensada en exportar, exportar, exportar, lo que diera, sobre todo productos agrícolas. E insertarse con los países desarrollados, comercializar con los países desarrollados, y miraba a esos países. A partir de algún momento en todo eso, por la crisis del 30’ y la Primera Guerra Mundial ayudaron mucho, eso cambiaron mucho las visiones de los argentinos y empezamos a pensar más en una economía más cerrada, en corporaciones, a ver si podemos mantener esto funcionando, porque eso llevó a crisis. Entonces cuando empieza a haber una crisis decis “uy esto no funciona más, cambiemos para este lado”. Muy típico de los argentinos, nos bandeamos de un lado a otro.